Nuestro nuevo tesoro

"Nuestro nuevo tesoro"

A través de los años, Manny y Frida demostraron ser una hermosa pareja unida por el amor. El joven Rivera no podía verse más feliz que cuando estaba con Frida, la joven peliazul que por largo tiempo añoro los besos de Manny y por fin podía probarlos. Ambos tenían 18 años y el inmenso amor que sentían el uno por el otro no había desaparecido, tan grande era que una de muchas noches se entregaron completamente a dicho sentimiento ignorando sus consiencias y cualquier voz en su mente que gritara que se detuviera. Esa noche sólo fue para ellos dos, para amarse intensamente y entregarse el uno al otro sintiendo sus cuerpos unidos mientras sus corazones latían fuertemente.

Había pasado un mes desde aquella inolvidable noche y la joven pareja seguían viviendo sus vidas cotidianas; Manny por su lado combatía al crimen y Frida seguía con sus respectivos estudios en la preparatoria Leone, pero muy pronto, un enorme cambio y temible enemigo llegaría a sus vidas.

Todo comenzó un lunes en que Frida se desmayó en clase de Literatura. Manny corrió a socorrerla e inmediatamente la lleva a la enfermería. El moreno jamás había visto a la peliazul tan pálida y débil, por su mente se repetía el momento en que la vio caer al suelo, él prácticamente se tira para levantarla y al verla de cerca nota sus ojeras tan claramente que pudo pensar que la pobre no durmió en toda la noche. Una hora más tarde Frida comienza a despertar abriendo sus ojos lentamente para encontrar a su lado la inconfundible figura morena de Manny, quien no se separó de ella ni un sólo instante.

-¿Manny?- preguntó Frida confundida y recuperando la conciencia.

-¡Frida!- exclama Manny- ¿Estas bien?-

-Si pero ¿Qué pasó? Mi cabeza me mata-

-Te desmayaste en clase de literatura ¿No te lastimaste?-

-Según yo no, aunque todo me da vueltas-

-Traeré a la enfermera-

-No te preocupes Manny, estaré bien, creo que estoy así porque no dormí bien en la noche-

-¿No dormiste bien? ¿Por qué?-

-Esque tuve nauseas en la madrugada. Creo que algo me cayó mal-

-Frida ya me estas preocupando, ¿segura que te sientes bien?-

-Si Manny, talvez necesito ir a casa- Frida, a pesar de que estaba mintiendo porque sentía unas terribles nauseas, no quería preocupar a Manny, se notaba que el joven Rivera no creía en las palabras de su amada, sabía perfectamente que algo no era normal en ella y para disumularlo Frida le da un beso en la mejilla logrando tranquilizarlo- Estaré bien mi Tigre, no te preocupes, sólo necesito descansar-

-Bien, entonces empezarás desde ahora, yo mismo te llevaré a tu casa- Manny gira la hebilla de su cinturón y se transforma en El Tigre y una vez que saca su mano a la ventana para engancharse a un edificio cercano, toma a Frida de la cintura y ambos salen rápidamente del lugar sin decirle a nadie. Estando en la residencia Suárez Manny toma en sus brazos a Frida como si fueran recién casados y delicadamente la deja en su cama, donde una vez que la cubre con una sábana y se queda con ella hasta que cae dormida le informa a los señores Suárez sobre lo ocurrido y regresa a la escuela. Pasaron varias horas, las clases habían terminado y Manny quiso pasar a ver a Frida, pero Carmela Suárez le dice que seguía dormida, fue entonces que decidió retirarse a su casa, pero por la mente del moreno no dejaba de pasar la idea de que su amada novia sufría alguna enfermedad grave. Mientras tanto en la habitación de Frida, la joven despertaba de su larga siesta, ya no sentía las nauseas, de echo ahora tenía un enorme antojo de comer churros con fresa. Sonaba completamente raro y asqueroso pero por alguna razón no podía dejar de pensar en comerlos. Bajó a la cocina a buscar mermelada, nadie se encontraba en casa, sólo halló la nota de su madre que decía que fue a comparle medicinas para el mareo. La joven sonrió con la idea de que su mamá se preocupara tanto por ella pero antes de poder llamarla al celular para reportar que ya había despertado el telefono de la casa suena e inmediatamente lo contesta.

-¿Hola?- pregunta Frida levantando el teléfono.

-Señorita Suárez habla la enfermera Vásquez de la escuela-

-¿Qué tal enfermera? ¿Cómo está?-

-Yo bien hija gracias, pero ¿porqué te fuiste repentinamente? tenía algo importante que decirte-

-Lo siento pero Manny insistió en que volviera a casa para descansar, pero no se preocupe, ya me siento mejor-

-Pero hay algo importante que debe saber señorita Suárez-

-¿De que se trata? ¿Manny está bien?-

-Si no se preocupe, el joven Rivera esta bien, pero hay algo que quisiera comentarle respecto a su salud,¿pudiera hablar con usted hoy mismo? Mañana es fin de semana-

-Si claro, ahorita mis padres no estan en casa- Frida cuelga el teléfono y en un abrir y cerrar de ojos llegó la enfermera de la escuela a su casa. La señora reflejaba en su rostro cierta preocupación y angustia, lo cual preocupó a la peliazul, ya que si fue a verla hasta su hogar para decirle algo es porque se trataba de un asunto importante.

-Gracias por venir a visitarme enfermera Vásquez-

-Por favor díme Rosa, quiero que me tengas confianza Frida,pero dejemos ese tema de lado, quiero hablarte de algo sumamente importante-

-Si ¿Que pasa?-

-Antes quisiera hacerte una serie de preguntas, ¿De casualidad has estado sintiendo constantes mareos?-

-Si, de echo hoy que me desperté en la enfermería los volví a sentir-

-Ajam...¿Y tienes nauseas o ascos?-

-Si, muy seguido, es mas, anoche no dormí bien porque no dejé de sentirlos-

-¿Enserio? y...¿Cuando fue la última vez que tuviste tu periodo menstrual?-

-Hace como un mes, de echo ahora que lo pienso se está atrasando, ¿Por qué las preguntas?-

-Frida- la enfermera toma un poco de aliento para las palabras que estaba a punto de decir y poniendo su hombro sobre el de ella deja escapar la noticia tan urgente que debía decir- Estas presentando los síntomas de un embarazo-

-¿¡¡Qué!!?- Gritó Frida a todo pulmón al oir tal noticia. Por unos segundo se quedó completamente helada sintiendo cómo el corazón se paraba y casi rompiendo a llorar comienza a sobarse el vientre- ¿Está segura de lo que dice?-

-Frida soy enfermera, te mentiría si te dijera que no lo estoy, sólo quería decirte porque te conozco desde hace tiempo y creí que era mi deber que lo supieras hija. A juzgar por tu reacción no eres virgen ¿Cierto?-

-Ci-cierto- tartamudeó Frida.

-Y debo suponer que si fuera cierto tu embarazo el padre de tu bebé sería el joven Rivera-

-Si,Manny ha sido el único con quien he estado y a quien amaré por el resto de mi vida. Pero ¿Qué voy a hacer?-

-Tranquila, no saquemos conclusiones adelantadas, primero hazte una prueba y si resulta ser cierto lo que te ocurre...pensaremos en algo que hacer- Y efectivamente, al día siguiente ambas fueron a una clínica donde Frida se sacó un poco de su sangre para hacerse pruebas de embarazo, las cuales, un día después fueron entregadas a dicha joven, quien al leerlos pintó en sus mejillas un par de lágrimas heladas.

-Positivo...-suspiro débilmente Frida mirando llorosa a la enfermera Rosa- Estoy embarazada- La enfermera abrazó fuertemente a Frida sintiendo su inmenso dolor, ahora la joven tenía un destino sellado, ya no podría hacer nuevamente las locuras que tanto añoraba hacer con su novio Manny, ni tampoco podría volver a ser testigo de ninguna de sus batallas o a salir a fiestas y paseos escolares, en nueve meses...Frida sería madre.-¿Y ahora qué voy a hacer?-

-Frida, eres joven, estas estudiando, te falta mucha experiencia y...-pero antes de que la enfermera pudiera terminar la oración la peliazul comprendió claramente el mensaje que trataba de dar e inmediata y furiosamente la interrumpe.

-¡Ni siquiera lo diga!- Pero reflexionando un poco logra calmarse y trata de pensar que la enfermera solo piensa en lo mejor para ella- Lo lamento pero entiendo perfectamente lo que trata de decir, no abortaré a este bebé

-Entiendo Frida, eres una chica fuerte y valiente, pero tener un hijo no es nada fácil. Primeramente, debes decírselo a Manny-

-No, no puedo hacerlo-

-¿Por qué?-

-Porque él no tenía planeado tener un hijo conmigo. No aún-

-Eso debió pensarlo antes de no protegerse como debía. Eso ya no lo pueden remediar, pero conociendo al joven Rivera es un hombre responsable y honesto, sé que se encargará de cuidarlos-

-Pero ¿Y si no lo quiere tener? ¿Y si ya no quiere verme?-

-Eso sólo lo puedes averiguar hablando con él- La enfermera tenía razón, tarde o temprano Frida debía decirle a Manny que tendrían a un hermoso hijo. Reuniendo todo su valor lo cita en el parque donde solía tomar siestas con él cuando eran niños. Cuando la peliazul se sienta en una banca contempla a varios niños alegres, jugando a las escondidas o a la roña, otros en los toboganes y unos cuantos en los columpios. Frida pintó una enorme sonrisa pensando que su pequeño hijo muy pronto podría estar jugando con otros niños, haciendo castillos de arena o trepando árboles tal y como solía hacer con Manny cuando eran niños. Minutos después distingue a lo lejos la silueta de Manny que se acercaba rápidamente a Frida para saber cómo estaba, ya que con tanto crímenes en la ciudad no tuvo tiempo de ir a visitarla.

-¡Frida!- gritó Manny mientras se aproximaba a ella jadeante y cansado. Una vez que se halló junto a ella le dio un beso en la mejilla y le tomó la mano- Lamento haber llegado tarde pero los criminales no tienen descanso ¿Cómo te has sentido?-

-Un poco mejor, gracias Manny- dijo Frida desanimada, en el momento que lo vio venir los nervios comenzaron a invadirla de pies a cabeza, faltaban unos segundos para tener que decirle a su novio la gran noticia.

-Frida ¿Estas bien? Te noto triste

-Esque hay algo importante que debes saber-

-¿Qué pasa Frida? ¿Estas enferma? ¿Necesitas algo? ¿Quieres un churro?-

-Churros no, gracias- dijo Frida sintiendo un inusual asco por su comida favorita- Se trata de otra cosa mi amor-

-¿Estas rechazando un churro? Eso quiere decir que lo que me diras es grave-

-Veras Manny, siéntate. Lo que te diré cambiará nuestras vidas para siempre, pero antes de decirte quiero que sepas que te amo y que si no quieres formar parte de esto lo entenderé-

-Frida yo te amo, te quiero demasiado como para que dejes de ser parte de mi vida, y aunque no sé lo que me dirás estaré contigo todo el tiempo. Dime 'Qué me vas a decir?-

-Manny...-dijo Frida susurrando con dificultad, sólo faltaban decir las dos palabras más importantes de su vida- Estoy...-pero antes de terminar la oración el hermoso día se vio cubierto por nubes negras y la tierra comenzó a temblar sacudiendo todo a su paso y de las profundidades del avismo salieron las esqueléticas manos de los esqueletos bandidos que comenzaron a tomar prisioneros por toda la ciudad. Era evidente que quien causaba tanto alboroto era la mismísima Sartana de los muertos, quien comenzó a esparsir el pánico y sufrimiento por todas las calles de la Ciudad Milagro acompañada de su maligno nieto Django de los muertos. Ambos empiezan a tomar rehenes y a destruir todo en la comunidad, haciendo que mucha gente teminara herida o saliera despavorida del pueblo. Manny gira rápidamente su hebilla y se transforma en El Tigre para detener a los perversos villanos aunque le cueste la vida.

-Frida- dice Manny con tono serio y preocupante- Quédate aqui, ire a detener a Django y a Sartana-

-Pero Manny, son muy poderosos, tú solo no podras contra ellos, espera a que llegue tu familia-

-Pero si no lo hago destruirán todo a su paso, los detendré aunque me cueste la vida-

-¡¡Manny no!! ¡¡Antes debes saber que...!!- Pero antes de terminar la oración Manny la empuja a un lado para salvarla de un rayo de energía rojo proveniente de la guitarra de Django, quien se separó de su abuela buscando a Manny y a Frida por toda la Ciudad Milagro. Al parecer la huesuda sólo quería causar destrucció y alboroto por toda la ciudad, pero el joven esqueleto tenía otro motivo...venganza.

-¡Vaya Vaya!-gritó Django al ver a Manny después de tantos años- Pero si es mi enemigo El Tigre, veo que realmente has crecido. Y Frida, de verdad te ves muy bien-

-¡Django!-gritó furioso Manny al verlo acercarse peligrosamente a él y a Frida- ¿Qué demonios pretendes hacer aqui?-

-Venganza, ¡Me las pagarás por haberme humillado hace seis años, te arrepentiras!

- ¡Mejor regresa al agujero de donde saliste!-

-Oh claro, yo ya me iba, pero no sin antes llevarme un recuerdo a la tierra de los muertos. ¡Bandidos ahora!- Dijo Django mientras tocaba su guitarra para invocar a un pequeño escuadrón de esqueletos que atraparon a Manny y una vez que éste fue inmovilizado un par de manos esqueléticas salieron de las profundidades de la tierra para sujetar a Frida de sus pies impidiéndole escapar.

-¡¡Ahh dejenme ir!!- gritaba Frida mientras trataba de liberarse de las manos esqueléticas que la tenían aprisionada.

-¡¡Frida!!- gritó Manny contemplando cómo Django se acerca a Frida mientras prepara su guitarra- ¡¡Déjala ir Django!! ¡¡Ella no tiene nada que ver con esto!!-D

-Te equivocas Manny- dijo Django con voz siniestra mirando a Manny- No creas que estoy ciego como para no darme cuenta de cúanto quieres a esta diosa de cabello azul-

-¿Que soy qué?-

-Por eso he decidido hacer un pequeño experimento. ¿Cuántas lágrimas podrían de derramar los ojos de El Tigre si acabo con la vida de su linda noviecita primero? jajajajajajajajaja-

-¡¡Sobre mi cadáver pondrás un hueso sobre Frida!! ¡¡No permitiré que la lastimes!!-

-¡Ja! ¡Eso se puede arreglar! ¡Bandidos ahora!- Recibiendo la orden de su amo todos los esqueletos comienzan a golpear brutalmente a Manny. El joven Rivera recibe interminable golpes por todo su cuerpo, en el estómago, la cara, los brazos, etc torturándolo lenta e incansablemente. Frida sólo contempla horrorizada el sufrimiento de su novio quien exhala ahogados gritos de dolor.

-¡¡Por favor ya basta!!- Grita Frida desesperada- ¡¡Esto es horrible!!-

-Tranquila hermosa- dice Django con su guitarra lista y acercándose a Frida- Eso no es nada comparado a lo que estoy apunto de hacerte jajaja-Django chasquea los dedos como una señal a sus bandidos para que dejen de golpear a Manny y nuevamente lo inmovilizan. El aspecto del joven Rivera empeora drásticamente, tenía heridas por todo el cuerpo, un ojo morado y gotas de sangre cayendo al suelo. Django se dirige hacia Manny y agarrándo su cuello violentamente levanta su cabeza para que contemple el rostro lloroso de Frida.

-El Tigre-dice Django mientras se agachaba para hablar con Manny- quiero que veas esto, contempla por última vez el bello rostro de Frida, porque una vez que acabe con ella te aseguro que mientras yo esté en la tierra de los muertos no permitiré que nadie la vuelva a ver, ni siquiera las almas en pena-

-D-Django- dijo Manny débilmente, pero se podía distinguir claramente su voz furiosa e incontenible enojo- No la toques, no se te ocurra lastimar a Frida-

-Muy tarde, pero descuida Rivera, para que veas que no soy tan mal enemigo dejaré que le grites una última cosa a tu novia antes de que la asesine ajajajajaajajjaajaja- Manny no sabía que hacer, se encontraba completamente inmovilizado por 4 esqueletos bandidos que acababan de torturarlo, por primera vez se sentía acorralado, atrapado e incapaz de salvar a su amada novia. Pero a pesar de todo lo ocurrido aún sentía una gran preocupación por Frida, quien lo había citado en ese lugar para hablarle algo sumamente importante. Con todas sus energías, Manny dirige su voz a Frida para que lo escuche.

-¡¡Frida!! ¡¡Perdóname porque no pude protegerte, no mereces pasar por todo esto!! ¡¡Yo te amo con mi vida!! ¡¡Sólo te pido que me digas qué es lo que querías decirme!!- A Frida la invadían los nervios de dar la gran noticia, aún cuando estuviera a punto de morir no podía evitar sentir una gran preocupación, ahora no sólo su vida peligraba sino también la de su bebé, por primera vez quería salir huyendo, pero no sin Manny. Frida suspiró para tranquilizarse y finalmente pudo decirlo.

-Manny...tú y yo...tendremos un bebé- Manny se paralizó al oir la palabra bebé, sus ojos se iluminaron de tal forma que su brillo casi enceguece a todos a su alrededor, incluso Django y los esqueletos quedaron boquiabiertos con la noticia. Eso lo explicaba todos, los mareos, los ascos, las nauseas, los desmayos y el extraño apetito de su novia sin mecionar su estado de animo, todo apuntaba a los síntomas de un embarazo. Por unos segundos la mente de Manny quedó en blanco, pero despues de recuperar la conciencia pintó la sonrisa mas bella que haya tenido en su rostro, pronto comenzó a derramar lágrimas con la idea de tener a otro Rivera para proteger, y con pensar en que su bella mamá será Frida lo hacía sentir una gran conmosión. Con sus ojos húmedos, pero llenos de alegría, Manny miró a Frida directo a sus ojos azules y con sólo ver su brillo, ella entendió que la noticia le causaba felicidad. Pero ese enternecedor cuadro de amor fue interrumpido por Django quien lanzó una gran risotada de victoria.

-Jajajajajajaja no lo puedo creer- decía Django casi llorando de la risa- ¿Tú y Frida tendrán un hijo jajajaja? Lástima que no te puedas ilusionar Rivera, porque al parecer me llevaré a la tierra de los muertos...un premio doble jajajajajaja-

-¡¡Nooo!!- gritó Manny forcejeando desesperado- ¡¡Aléjate de Frida!! ¡¡Ni siquiera se te ocurra Django!! ¡¡Te lo advierto!! ¡¡Los defenderé con mi vida a ella y a mi hijo!! ¡¡Soy capaz de asesinarte si les llegas a hacer daño!!-

-Aooww que tierno- se burló Django mientras apunta su guitarra a Frida.

-Haz lo que quieras conmigo Django, pero suelta a Frida ahora-dijo Manny.

-No Manny, no quiero que te lastimen- gritó Frida- Nosotros te necesitamos-

-¡Cállate!- dijo Django mientras la empuja contra un árbol que estaba detras de ella -Te veré en la tierra de los muertos Frida, y cuando llegue no imaginas lo que les espera a ti y a tu pequeño Rivera...¡¡Adios Frida Suárez!!-

-¡¡Nooo!!-gritó Manny mientras una inmensa aura verde lo rodea, la cual crecía segundocon segundo hasta que los esqueletos se desintegraron con la magnitud de su poder. Se trataba del antiguo espíritu de El Tigre, el cual inconsientemente Manny había invocado por proteger a su amada novia y a su futuro hijo. Django estaba a punto de disparar el rayo hacia Frida cuando fue cegado por la luz del aura de Manny, quien al ver la magnitud de su poder prácticamente le temblaban los huesos.- ¡¡Te dije que no le hicieras daño!!- Manny se lanza contra Django y comienza a golpear su cráneo provocando que éste saliera bastante herido, ya era demasiado el poder el antiguo espíritu de El Tigre y convinado con la furia de Manny le era imposible lanzar golpes contra él, incluso, con una de sus garras el joven Rivera le hizo una enorme cicatriz en el cráneo, una parecida a la de él, lo cual le causó mucho dolor. Django logra esquivar uno de los ataque de Manny y tomando su guitarra comienza a desaparecer en una nube de humo rojiza.

-Talvez venciste esta vez El Tigre-Dijo Django tocándose la cicatriz- pero no lograste romper mi guitarra, ¡¡Pronto volveré y te aseguro que pagarás caro lo que hisiste!! Buajajajajajajajaja- Y su enomre risotada de miedo y odio desaparece en una nuve de humo junto a los esqueletos bandidos y el sol comienza a aclararse otra vez. Manny se acerca asustado a Frida quien yacia en el suelo, pero afortunadamente no salió herida.

-Frida ¿Estas bien?- preguntó Manny preocupado refiriéndose a su vientre-

-Si no te preocupes-

-Pero Django te empujó, ¿No te lastimaste?-

-No tranquilo, por suerte me agarré a una rama del árbol y gracias a ello la caída no estuvo fuerte. No te preocupes-

-Frida- Manny cambia su rostro de preocupación a una mas seria. Éste toma la mano de su amada y mirandola a sus azules ojos le regala una sonrisa- Dilo una vez más, sólo una-

-Si Manny...estoy embarazada. Voy a tener un hijo tuyo mi amor- Manny da de brincos por todas partes, incluso se engancha de algunos árboles para columpiarse por todos hasta volver a donde se encontraba su novia. Manny toma a Frida en sus brazos y la carga dando vueltas de felicidad y poniéndola suavemente en el suelo nuevamente comienza a dar pequeños besos en su vientre.

-¡¡Ajuaaa!!- gritó Manny emocionado- ¡¡Un hijo!! ¡¡Otro Rivera en la familia!! ¡¡Y será nuestro hijo Frida!!-

-¿Entonces si te emociona la noticia?-

-¡Cómo no me va a emocionar, será un hijo nuestro!-

-Pero debemos enfrentar a nuestros padres, ellos aún no lo saben, ¿tienes idea de lo que te hará mi papá cuando se entere? Talvez te obligue a casarte conmigo-

-¿Y eso no te gustaría?-

-Por supuesto que me encantaría, no hay otra cosa en el mundo que me haga más feliz que volverme tu esposa Manny, pero tenemos 18 años, tendrás que buscar trabajo y debemos hacer muchos sacrificios por nuestro bebé-

-No me importa a quien deba enfrentar o lo que deba hacer, no importa que no pueda salir tantas veces a combatir al crimen o que tenga que buscar dos o tres trabajos, pero este hijo nuestro va a nacer y lo criaremos con todo el amor y cuidado que se merece-

-Yo también Manny, lucharemos juntos por nuestro pequeño, y verás que muy pronto tendremos a nuestro hijo jugando en este parque. Te amo Manny

-Y yo a ti Frida- Frida se arroja a los brazos de Manny celebrando la pronta llegada de su hijo. El moreno toca el vientre de la peliazul pensando que aunque su hijo todavía no se ha formado, por fin tiene vida, sentir la calidez le hacía creer que desde adentro de su novia su bebé les sonreía. El moreno carga a la peliazul como recién casados y se van a la casa Suárez para informar a todos sobre la llegada del hijo de Manny y Frida, pero niguno de ellos imaginaba, que cierto muchacho esqueleto los vigilaba desde el tejado de un edificio al otro lado de la calle, planeando su venganza.

-Rivera- gruñe Django mientras se toca la cicatriz que le hizo Manny en su cráneo- Te dije que pagarías caro lo que me hisiste, y me encargaré de que ese maldito engendro no nazca, y en cuanto a Suárez, no te preocupes por ella, no sufrirá por su la pérdida de su pequeño hijito porque Frida lo acompañará...¡¡A la tierra de los muertos!! jajajajajajajajajajajaja

Habían pasado nueve meses desde el ataque de Sartana y Django y para entonces todos los edificios y casas destruidas ya habían sido reconstruidas. En ese lapso de tiempo Manny y Frida le hicieron saber a sus parientes acerca de la llegada de su primer hijo. Por supuesto, al principio los adultos no tomaron muy bien la noticia, ya que se trataba de un embarazo fuera del matrimonio, incluso Emiliano casi asesina a Manny diciendo que era un aprovechado y un maldito por lo que le hizo a su hija, pero Frida lo defiende ante todo y el joven Rivera da su palabra de hombre que cumplirá con su responsabilidad como el padre del bebé y promete que en cuanto el niño nazca se casará con su amada novia. En cuanto a la familia de Manny era obvio que Rodolfo se enojara bastante por la idea de que su único hijo tendría un bebé a temprana edad, pero por otro lado todos, incluyendo a María Rivera, se sintieron orgullosos de ver cómo el más joven de la familia luchaba por sacar adelante a Frida trabajando y reuniendo lo suficiente para comprarse una casa y darle a su bebé la vida que merecía. Por su parte los Suárez pronto aprendieron a aceptar la idea de tener a un nuevo integrante en su familia, incluso a las hermanas de Frida les emocionaba la idea de tener a su primer sobrino muy pronto y cuando Manny salía a trabajar, ellas se encargaban de cuidar a Frida. Carmela le enseñaba a cocinar a Frida para empezar a convertirla en una buena ama de casa y madre, le dio un par de consejos sobre cómo arrullar a su bebé, cambiar pañales, cargarlo etc. y la joven peliazul sentía una gran emocion por la llegada de su hijo, incluso Manny esperaba ansioso a su bebé, se preguntaba si él también estaría indesiso de ser héroe o villano igual que él cuando era niño, pensaba en qué objeto místico obsequiarle cuando tuviera la edad adecuada, hasta planeaba las bromas que le enseñaría a hacer, incluyendo un buen escape para que no lo descubran. Realmente, todos esperaban ansiosos al nuevo integrante de la familia Rivera Suárez, pero cierto villano huesodo planeaba la destrucción definitiva de aquel inocente bebé y también de su madre con el objetivo de la venganza contra El Tigre, desapareciendo todo aquello que tanto anheló y amó con todas sus fuerzas, empezando por su futura esposa y su pequeño hijo.

Una tarde como muchas, Manny salió del trabajo y llegó a "la casa del macho" antes de visitar a Frida como normalmente acostumbraba. El joven Rivera estuvo conversando con su familia un largo rato cuando de repente recibieron una llamada de Davi Rocco, quien se hizo gran amigo de Manny cuando pasó a la preparatoria. El joven Burrito Albino decía que necesitaba hablar urgentemente con El Tigre diciendo que se trataba de Frida y su bebé, y pensando que podria llegar a ser algo grave sale disparado a casa de su amigo Davi Rocco. Extrañamente el clima había empeorado como habían dicho en el pronóstico de tiempo, se había desencadenado una temible tormenta, donde las gotas de lluvia caían con gran fuerza, el viento soplaba doblando los árboles y los truenos resuenan por todas las calles de la ciudad Milagro. Manny batalló demasiado para llegar en una pieza a casa de Davi Rocco, pero después de un rato luchando contra la corriente del viento logra posarse en la puerta de entrada. Tocó el timbre por un largo rato pero nadie abría la puerta y eso comenzaba a preocupar mucho al moreno, ya que El Burrito Albino lo consideraba su modelo a seguir y siempre que escuchaba que iría a su casa tenía la puerta abierta en cuanto colgaba el teléfono. Mas de repente escuchó que el ruido de un jarrón rompiéndose provenía de dentro de la casa y Manny no resistió más la incertudumbre de saber que estaba pasando y transformándose en El Tigre tira la puerta de una patada. Rápidamente se interna en la casa para encontrar a Davi Rocco en el suelo y amordazado en una silla sin mencionar las inumerables heridas que tenía en el cuerpo, nada grave, pero se notaba que al joven Burrito lo debilitaba. Manny usa sus garras para desatar sus cuerdas y cuidadosamente le guita la venda de la boca.

-¡Davi qué pasó!-pregunta desesperado Manny- ¿Estas bien?-

-Manny- dijo alegre Davi- me alegra que alguien escuchara el jarrón que rompí para que me salvaran. Me atacaron pero ¿Qué haces aqui?-

-Tú me llamaste-

-No lo hice, seguramente él lo hizo para realizar su venganza, a eso se refería ¡debes irte ya!-

-Pero ¿Quien te hizo esto? ¿Quien me llamó para que viniera? ¿Quien quiere vengarse de mí?-

-Django de los muertos, ha vuelto y quiere destruir tu vida para siempre- dijo Davi asustado de recordar los ojos sangre del maligno esqueleto. A Manny se le heló la sangre cuando escuchó el nombre de uno de sus peores enemigos, a pesar de que habían pasado nueve meses aún recordaba con claridad las atrocidades que hizo en la ciudad Milagro, su sed de venganza y sangre, él era el villano que siempre atacaba donde más te dolía o mejor dicho a quien más querías. Fue entonces que Manny se dio cuenta de que no tenía que pensar mucho en qué haría Django para vengarse, era algo tan obvio y simple, él lo hizo ir hasta la casa de Davi para alejarlo de Frida, ya que su venganza consistía en la muerte de su amada y de su hijo. Manny agarró del brazo a Davi y con su otra mano se dirigieron rápidamente a la "casa del mariachi", el hogar de la madre de Manny, donde la peliazul se encontraba, todas las tardes su madre la llevaba a su casa para enseñarle a tejer y Manny siempre la recogía para evitar que caminara. Ahora no sólo peligraba la vida de su madre y su novia, también la de su hijo. Mientras tanto en "La casa del mariachi" Frida, quien ya tenia su pancita de embarazada, estaba terminando de tejer un gorrito azul para su pequeño hijo, el cual ya sabían que sería un varoncito, mientras que María Rivera mira preocupada por la ventana inquieta porque que su hijo Manny llegara para recoger a su novia. Ambas no podían evitar sentirse preocupadas.

-Gracias por no decirle a Manny que su hijo será varón, quiero darle la sorpresa, espero que no encuentre toda la ropita que le tejí a mi bebé. ¿Señora Rivera? ¿Está bien?

-¿Uh? claro Frida, estoy bien, solo que la tormenta cada vez se pone peor- dijo María viendo cómo el viento comienza a llevarse gran cantidad de hojas.

-¿Usted cree que Manny esté bien?- dijo Frida terminando de tejer.

-Tranquila Frida, talvez Manny se atrasó-

-Tengo miedo de que algo le pasara- Frida comenzó a llorar levemente, María había olvidado que durante un embarazo las mujeres se vuelven más sensibles, ahora se sentía mal porque hizo a Frida llorar.

-No llores Frida, no te preocupes, Manny volverá pronto, recuerda que él es El Tigre-

-Talvez tenga razón, lamento si me puse así-

-Descuida, yo también me volví demasiado sensible cuando estaba embarazada de Manny, pobre Rodolfo-

-jajajaaja Gracias...¡¡Ahhh!!-Repentinamente Frida comenzó a gemir de dolor mientras ponía sus manos en su vientre. Comenzó a retorserse de dolor e incluso hizo muecas de angustia.

-¿¡¡Frida que tienes!!?- preguntó María Rivera sospechando lo que ocurría.

-¡¡Creo que ya viene el bebé!!-dijo Frida con todas las fuerzas que la situación le pudo dar.

-¡Santo cielo! ¡Debemos llevarte al hospital!-

-Pero ¿Y Manny?-

-No lo sé, pero ya no podemos esperarlo, te llevaré en mi auto- Pero de repente se escuchó el timbre sonar y María Rivera, pensando que era su hijo Manny, se sintió aliviada y se aproximó para abrir la puerta, pero al llegar ahí se encuentra con la esquelética figura de Django, quien con sus ojos color sangre y su nieva cicatriz en el cráneo mira con odio a María Rivera y usando su guitarra lanza un rayo de energía. Por suerte María tenía la suficiente coordinación para esquivarlo y viendo claramente al enemigo se pone a la defensiva.

-¡Tú!- gritó María furiosa- ¡Sal de mi casa ahora!-

-No sin antes cumplir mi venganza-dijo Django exponiendo sus garras y mirando de reojo a Frida quien se encontraba en el sillón retorciéndose de dolor- Qué lastima que la deba incluir a usted, ya que es la madre de El Tigre-

-Talvez no lo sepas pero yo sé cómo defenderme- dijo María mientras saca de su bolso el guante de plata peligrosa. Se lo coloca rápidamente y se transforma en la poderosa superheroína que es-¡¡Ratatata!! ¡¡Plata peligrosa!! ¡Aléjate de mi futura nuera! ¡No dejaré que le hagas daño!-

-Muy bien señora, usted lo pidió- Django comienza a lanzar rayos de energía rojos mientras que María Rivera esquiva sus ataques y lo golpea con su guante de plata peligrosa. Frida sólo contemplaba adolorida la batalla mientras trataba de resistir las contracciones del parto, las cuales se hacían cada vez más grandes. A pesar del terrible dolor de parto, Frida aún no perdía el sentido común, usando su lógica dedujo que si Django atacaba y Manny aún no llegaba por ella era significado de que el esquelético villano tuve que ver con la tardanza de su novio, pensaba que algo malo le había echo el enemigo causándole gran preocupación.

-¿¡¡Qué le hisiste a Manny!!?-Preguntó Frida furiosa mientras seguía soportando las contracciones de su vientre

-Sólo me encargue de que no nos moleste un tiempo- dijo malisiosamente Django- Pero esta anciana me esta quitando el tiempo-

-¡¿Anciana?!- grita furiosa María- ¡¡Acabaré contigo saco de huesos!!- María hizo brillar su guante y preparando un golpe final vuelve a dar su grito de guerra y se lanza contra Django, pero éste esquiva el ataque fácilmente y preparó su guitarra para atacar a plata peligrosa por la espalda.

-Tiene razón señora...¡¡Acabaré con esto de una buena vez!!- Y dicho esto dispara un rayo de energía negro que lanza a plata peligrosa contra una de las paredes mientras se le cae su guante, convirtiéndola en humama otra vez y deja completamente inconciente a María.

-¡¡Señora Rivera!!- grita Frida a todo pulmón, pero María estaba inconciente y ahora Django se acercaba peligrosamente a la peliazul.

-No te preocupes por la señora Rivera- dijo Django burlándose y acercándose más y más a Frida, quien ya no aguantaba el dolor de las contracciones y no podía moverse- Yo te recomiendo que te preocupes por lo que te voy a hacer, a ti y a tu pequeño Rivera-

-¡Si tanto quieres matar a alguie entonces deja que nazca mi hijo y asesíname a mí!- grita Frida tratando de ofrecerse como sacrificio para salvar la vida de su bebé.

-Lo siento hermosa pero mi prioridad es hacer sufrir a Rivera lo más que pueda. Creo que empezaré contigo jajajajajaja-

-No por favor, mi bebé ya va viene en camino, te digo que lo dejes nacer y luego haces lo que quieras conmigo-

-Jajajaja Ya es tarde, me muero por que Rivera llegue para ver a su linda noviecita y a su engendro muertos, y de eso me encargaré personalmente- dijo Django mientras alza su filosa garra preparándola para lanzársela a Frida con gran velocidad la joven peliazul no tenía idea de qué hacer, ni siquiera tenía la fuerza suficiente para esquivrla, tampoco podía lanzar un golpe porque un movimiento, por más pequeño que fuera, le dolía hasta los huesos. Frida comienza a derramar lágrimas sintiéndo la enorme culpa conciente de que su muerte también matará a su hijo, quien estaba a punto de nacer. Lo único que pudo hacer fue cerrar los ojos y esperar el ataque mortal. Frida podría jurar que incluso escuchaba el ruido de la garra chocando contra el viento, el cual subía su volumen cada vez más hasta sentir que estaba a pocos milímetros de ella cuando de repente se escucha sólo silencio. Abriendo lenta y dolorosamente sus ojos Frida se encuentra con el hueso filoso de Django justo frente a ella, la cual fue detenida por un gancho con garras que sostenía con fuerza brutal su brazo esquelético. La joven peliazul voltea su mirada haca arriba donde justo en la ventana se hallan las figuras de Davi Rocco y Manny, quienes llegaron justo a tiempo para salvar a Frida. El rostro del burrito Albino expresaba un gran alivio por haber llegado antes de que las cosas se pusieran aún más feas, pero la mirada de ojos verdes de El Tigre reflejaban una furia incontenible e ira desatable. Django no sólo se había atrevido a lastimar a su madre sino que también estuvo a punto de matar a Frida quien estaba a mitad de trabajo de parto.

-Creí que la última vez que vi tu patético cráneo te dejé claro que no volvieras a acercarte a Frida-dijo Manny apretando sus dientes-y ahora te atreves a amenazarla con matarla a ella y a nuestro hijo...¡¡No te lo perdonaré!!-Manny usa el gancho con el que sostiene a Django para acercarse a él y lanzarle un poderoso puñetazo en el cráneo, el cual lo lanza lejos de Frida,directo hacia la pared, la cual se destruye y lo esconde entre los escombros echos. Manny aprovecha la oportunidad para revisar que Frida esté bien, ya que podía ver claramente en su rostro el sudor que reflejaba el cansancio de su novia y el dolor de su cuerpo

-Frida-preguntó Manny mientras se agachaba para recogerla del suelo- ¿Django Te lastimó? ¿Estas bien?-

-N-No Ma-Manny- dijo Frida débilmente- Nuestro hijo ya va a nacer-

-¿¡Qué!? ¿¡Aqui!? ¿¡Ahora!?-

-Si, no creo que pueda continuar, no aguanto el dolor-

-¡No Frida, no te rindas! ¡¡Por favor, hazlo por tí!! ¡¡Hazlo por mí!! ¡¡Hazlo por nuesto hijo!!-

-E-Esta bien pero necesito ayuda-

-Descuida, todo estará bien- Manny y Frida contemplaron cómo Django de los muertos se levantaba de los escombros y se dirigía a la pareja.- Debo detener a Django-

-Pero Manny...N-No me dejes-

-Tranquila, volveré pronto, mientras tanto Davi va a ayudarte-

-Pero...-

-Confía en mí- Manny miró los ojos azules de Frida, los cuales estaban llorosos, pero la joven sintió el calor, apoyo y amor de parte de su amado novio.

-Esta bien, ten cuidado por favor- Manny llama a Davi para que ayude a Frida con el parto mientras él se acerca a Django tratando de alejarlo de su novia lo más que pudiera. Davi se quita la chaqueta, y arrancando un pedazo de él se lo da a Frida para que lo muerda y aguante un poco más su dolor mientras trata de llevarla a un lugar más seguro donde Django no los vea. Como rayo corre al baño, trae unas toallas y comienza el trabajo de parto. Mientras tranto Manny y Django intercambian miradas asesinas, los ojos de ambos reflejaban un profundo odio, furia, el deseo de destruir al otro, definitivamente sería la última batalla.

-Vaya El Tigre- dijo burlón Django- veo que volviste a tiempo para salvar a tu linda novia antes de que pudiera jugar con ella y con tu hijo, ¿Porqué tienes que arruinar la diversión?

-Tú amenazaste a Frida a pesar de que se encontraba en mal estado-Manny furioso- Eres peor de lo que imaginé, yo la amo y la defenderé con mi vida, no permitiré que pongas un hueso sobre ella o mi hijo-

-Aoow que cursi Manny, de verdad te volviste más patético desde que me humillaste en el volcán, tu y yo podríamos gobernar este inmundo planeta, sólo tienes que deshacerte de todo lo que te estorba, esos estúpidos sentimientos no te dejará conquistar al mundo-

-No, nunca lo haría, yo jamás lastimaría a Frida, y mucho menos a mi hijo, ambos son más importantes que caulquier cosa en el mundo, los defenderé con mi vida y si para eso debo enfrentar criminales como tú, lo haré como un héroe-

-Entonces morirás como un idiota- Django se abalanza sobre Manny y comienza a arañarle su rostro, Manny logra empujarlo con la fuerza de sus piernas y lo ataca con sus garras, pero éste lo esquiva fácilmente. Utilizando su guitarra comienza a lanzar varios ataques, los cuales Manny esquiva mientras enviste a Django tratando de acercarse a él para tener un enfrentamiento de cuerpo a cuerpo. Pasando las horas ambos contrincantes resultan con varias heridas en el cuerpo, cansados y deseosos de terminar ese encuentro. Ambos habían llevado la pelea fuera de la mansión y siguieron combatiéndose en el jardín, dándole la oportunidad a Davi de seguir ayudando a Frida tranquilamente. De vez en cuando Manny escuchaba los gritos dolorosos de Frida y se detenía preocupado por saber cómo estaba su novia pero luego Django atacaba con su guitarra y continuaban con el encuentro.

-Me decepcionas Manny, y pensar que alguna vez tu y yo nos llevamos bien, lástima que te rebajaste a ser el novio de una patética y tonta humana que además de todo te molesta dándote un hijo, jajajajaja- Manny no resistió ese último comentario de Django y lanza un puñetazo al cráneo de tal forma que casi se rompe en dos.

-¡¡Límpiate la boca cuando hables de Frida y de mi hijo!! ¡¡Nunca vuelvas a decir que Frida es tonta y patética y mucho menos que mi bebé es una carga!!- Manny nuevamente se llena de aquel respandor verde invadiéndolo de una fuerza sobre humana.- ¡¡Antiguo espíritu de El Tigre!! ¡¡Yo te invoco!! Roooaaaar!!- Manny, con sólo lanzar una ataque con sus garras a la guitarra logra evaporizar a Django.

-¡¡Nooo!! ¡¡Mi guitarra!! ¿¡Qué has echo!?-

-Te dije que jamás permitiría que te volvieras a acercar a mis seres queridos, y mucho menos a Frida y a mi hijo- Django desaparece en una neblina roja la cual se desvancese con el viento. la tormenta por fin había cesado y Manny sintió un gran alivio por haber detenido al maligno esqueleto y salvado a su amada novia. De la nada, la tranquilidad que rodeaba al moreno fue interrumpido por el grito de Frida, el cual se oía más ahogado y fuerte que los anteriores, pero después de éste, se escucha el llanto de un bebé. Manny entra rápidamente a la mansión donde debajo de las escaleras, hundidas por una ligera sombra, se encuentra Davi quitándose el sudor de la frente y con una gran sonrisa.

-¡Davi!- grita Manny impaciente y desesperado.

-Manny, ¿venciste a Django?-

-Gracias al cielo sí, pero eso no importa ¿Y Frida?- Davi pinta una enorme sonrisa en su rostro y señalando con su mano logra distinguir la figura de Frida recostada en la pared y en sus brazos se encuentra un pequeño bebé que estaba envuelto en la chaqueta de Davi y recostado sobre el pecho de su madre.

-Felicidades Manny- dijo Davi orgulloso- Es un hermoso niño- Manny casi llora al ver a la hermosa criaturita recargada en Frida, quien también estaba llorando de alegría mientras le tomaba la manita.

-Ten Manny- dice Frida tranquila y feliz- Aqui está el hijo de El Tigre- Manny lo carga con gran orgullo y felicidad y lo abraza fuertemente mientras sus lágrimas caen a suelo. Poco a poco María fue despertando y al contemplar la bella escena familiar también llora acercándose a ellos para conocer a su nieto.

-¿Y cómo lo llamarán?- dice Davi Rocco-

-Tenía pensado ponerle Emilio- dijo Frida mirando al bebé que sonreía mientras jugaba con su cabello.

-Me parece excelente idea- dijo Manny- bienvenido a la familia Emilio Rivera Suárez, ahora, avisemos a los demás- Manny se lleva cargando a Frida, quien estaba un poco debil por el parto, María llevaba en brazos a Emilio y Davi Roco los sigue sintiéndose orgulloso de haber ayudado a traer al mundo al hijo de El Tigre. Todos felicitaron a Davi por su coraje y a Manny y Frida por el hermoso bebé que tuvieron. Meses después Manny se casó con Frida y se mudaron a una casa cerca de la escuela Leone, donde todos los días veían pasar a los niños alegres imaginándose que algún dia su hijo podría estar estudiando. A través de los años, criaron a su hijo como una familia próspera y llena de orgullo, no había nadie en el pueblo que no reconociera a Manny Rivera, alias El Tigre, Frida Suárez, la esposa de El Tigre y Emilio Rivera Suárez, el hijo de El Tigre como una gran familia unida.

Fin